El pasado domingo 19 de febrero, Saul Blanch se juntó con los músicos de Espíritus Guerreros, para revivir las canciones del disco debut de Rata Blanca. Fue una noche para el recuerdo, en el Pool de Ituzaingó.
| Crónicas |
Pasadas las 00:30 horas, llegamos a El Pool, y de entrada, nos llevamos una gran sorpresa al ver que habían reformado el local. Ya no estaba en el medio aquel pool que ocupaba espacio, y habían subido la altura del escenario. Ahora si, se podían disfrutar recitales de músicos de la talla de Saul Blanch, o como en aquella ocasión de Logos.
A las 2 de la madrugada, luego de los actos de Richard Arena Trio y Espíritus Guerreros, salió Saul Blanch al ritmo de "El Sueño De La Gitana", junto a los músicos de ésta última banda, quienes fueron en gran parte, los que hicieron posible ésta fecha, insistiendo y animando al vocalista a realizar el evento. Siguieron en la lista "El Último Ataque" y "Rompe El Hechizo".
A Blanch se lo notaba a gusto y de muy buen humor, y su voz no ha sufrido grandes deterioros, ya que interpretó en un gran nivel las canciones como si no hubieran pasado ya, 24 años de haberlas grabado por primera vez. Tampoco se quedaron atrás los músicos de Espíritus Guerreros, que de forma impecable se tocaron todo el álbum; Destacable fue el trabajo del guitarrista que se bancó todos los solos que toca habitualmente, nada menos que Walter Giardino. Todos éstos detalles se pudieron notar con claridad en temas más lentos como, "Gente Del Sur" y "La Misma Mujer".
Las últimas canciones fueron las infaltables "Chico Callejero" y "Solo Para Amarte", causando el delirio de los que pudieron disfrutar otra vez de éstos clásicos con las voces originales. Quedaron atrás los dos instrumentales "Preludio Obsesivo" y "Otoño Medieval", que también forman parte de la placa.
Todo parecía terminar cuando ya no quedaban canciones del disco por tocar, y Saul se retiraba saludando por detrás del escenario. Pero abajo le pedían más, incuso temas de su carrera solista. Finalmente, volvió para regalar el último tema. Fue nada menos que "La Leyenda Del Hada Y El Mago", confesando que él había cantado ya éste tema, antes de que lo hiciera famoso Adrián Barilari, pero que no recordaba muy bien la letra. De igual manera, el tema salió bastante bien y fue toda una perla para cerrar la fecha.
El presente parece sonreírle a Saul Blanch que promete seguir en la movida pesada, ya que dicho por él mismo, sigue haciendo ésto solo por el hecho que le apasiona ésta música y no por otra razón.
Por: Emiliano Delle Donne.
A las 2 de la madrugada, luego de los actos de Richard Arena Trio y Espíritus Guerreros, salió Saul Blanch al ritmo de "El Sueño De La Gitana", junto a los músicos de ésta última banda, quienes fueron en gran parte, los que hicieron posible ésta fecha, insistiendo y animando al vocalista a realizar el evento. Siguieron en la lista "El Último Ataque" y "Rompe El Hechizo".
A Blanch se lo notaba a gusto y de muy buen humor, y su voz no ha sufrido grandes deterioros, ya que interpretó en un gran nivel las canciones como si no hubieran pasado ya, 24 años de haberlas grabado por primera vez. Tampoco se quedaron atrás los músicos de Espíritus Guerreros, que de forma impecable se tocaron todo el álbum; Destacable fue el trabajo del guitarrista que se bancó todos los solos que toca habitualmente, nada menos que Walter Giardino. Todos éstos detalles se pudieron notar con claridad en temas más lentos como, "Gente Del Sur" y "La Misma Mujer".
Las últimas canciones fueron las infaltables "Chico Callejero" y "Solo Para Amarte", causando el delirio de los que pudieron disfrutar otra vez de éstos clásicos con las voces originales. Quedaron atrás los dos instrumentales "Preludio Obsesivo" y "Otoño Medieval", que también forman parte de la placa.
Todo parecía terminar cuando ya no quedaban canciones del disco por tocar, y Saul se retiraba saludando por detrás del escenario. Pero abajo le pedían más, incuso temas de su carrera solista. Finalmente, volvió para regalar el último tema. Fue nada menos que "La Leyenda Del Hada Y El Mago", confesando que él había cantado ya éste tema, antes de que lo hiciera famoso Adrián Barilari, pero que no recordaba muy bien la letra. De igual manera, el tema salió bastante bien y fue toda una perla para cerrar la fecha.
El presente parece sonreírle a Saul Blanch que promete seguir en la movida pesada, ya que dicho por él mismo, sigue haciendo ésto solo por el hecho que le apasiona ésta música y no por otra razón.
Por: Emiliano Delle Donne.
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